Claro después de 2 semanas, 2 meses o 2 años, cualquiera puede tener una actitud pesimista...
¿Pero desde cuando la tienes? ¿Lo habías notado? Te reto a que lo descubras y cómo salir de ese hoyo.
Si de pronto tu cabeza se ha llenado de:
....“llevo mucho tiempo (días, meses, años…) buscando trabajo y no me sale nada”, “no valgo para nada”, “es imposible encontrar trabajo”, “nadie me llama”, “a mis años no voy a encontrar trabajo”, “todo me sale mal”, “la culpa es del reclutador que no me valora”, “estoy sobrevalorado”, “la crisis económica” “la baja de empleos” , “me falta el inglés, el posgrado la master, por eso no me llaman”, “la competencia está muy dura” etc…
¡PARA POR FAVOR!
Primero entendamos y sobretodo tú, un poco de tu personalidad al buscar empleo.
Como todos sabemos, la búsqueda de empleo no es camino fácil de emprender. De hecho, es un camino difícil donde tienes que tomar numerosas decisiones para lograr alcanzar tu objetivo: un puesto de trabajo que se adecue a tus necesidades e intereses.
Este camino, en función de cada uno de nosotros, puede ser más corto o prolongado, con o sin obstáculos, en línea recta o con curvas, pudiendo incluso parecer un camino tan sumamente largo y complejo que no nos permita ver la luz del final (nuestra recompensa) y terminemos frustrándonos y “tirando la toalla“. Pero de antemano, poner de relieve que no es imposible, aunque lo parezca.
Párate a reflexionar y pon los pies sobre la tierra. Tan importante es tener un buen CV, como gestionar toda la negatividad que produce la búsqueda de empleo y mucho tiene que ver:
Tu actitud, tu manejo de frustracion, tus creencias de ti y de la vida.
Reflexiona, estás pensando o eres del tipo que dice: “llevo mucho tiempo (días, meses, años…) buscando trabajo y no me sale nada”, “no valgo para nada”, “es imposible encontrar trabajo”, “a mis años no voy a encontrar trabajo”, “todo me sale mal”, “la culpa es del reclutador que no me valora”, “estoy sobrevalorado”, “la crisis económica” “la baja de empleos” y un largo sin fin de frases que continúan por esa línea, que llevan a un mismo lugar, al primer punto:
1.LA FRUSTRACIÓN.
La frustración es un síndrome que afecta en mayor o menor escala a los sentimientos de un individuo, por no poder alcanzar un propósito, meta, expectativa o cometido, viendo sus intentos truncados y no satisfechos Y cuando el individuo llega a este punto, tu puedes tener cualquiera de estas 3 reacciones:
LA AGRESIÓN: Este mecanismo de respuesta implica la agresión a ti mismo o a terceros, física o verbalmente, directa o indirectamente. A culpar, amenazar, gritar, despotricar, vengar, criticar, etc. Aflora mediante la irritación de nuestra personalidad y en definitiva, es el mecanismo de respuesta menos apropiado e inválido, ya que no solo no contribuye a la desaparición de esa aptitud, sino que además la retroalimenta. Esta actitud que aunque no es la más común es el reflejo de toda inmadurez. Normalmente es común en personas que no aceptan su responsabilidad y que se puede ver reflejado en las entrevistas, personas que quieren controlar todo, inseguras de sí mismas, narcisistas, egoístas, pero si algo sale mal, jamás acepta su culpa.
LA ESCAPADA: Es esa situación que tanto nos ahoga o angustia. Todo lo contrario a la anterior nos hace deprimirnos, llorar, encerrarnos en nosotros mismos, culpar a la vida, menospreciarnos, no valorarnos y dudar mucho de nuestras capacidades. En la búsqueda de trabajo sería aquello a lo que popularmente se conoce como “tirar la toalla”, y es el mecanismo que no debes de elegir, dado que no te ayudará a encontrar la salida, sino al contrario, a hundirte más en el abismo, a desistir en la búsqueda de empleo.
LA SUSTITUCIÓN: Este es el mejor de los mecanismos que puedes adoptar para dar respuesta a esa situación negativa. ¿Por qué? Porque tratarás de sustituir esa sensación mediante otras alternativas; por otros caminos que logren rebasar los obstáculos que has encontrado. Es gente donde ve el problema lo vuelve solución de los que aportan, crean, desarrollan, aprenden y que no encontrar empleo si bien es un obstáculo, no se dejan vencer ante la adversidad. Puedes crear empleos donde no hay e independizarse. Pero no abandonan al 100 el objetivo.
CONSEJOS PARA EVITAR LA FRUSTRACIÓN
Crea un plan de acción para tu búsqueda de empleo: Esta herramienta puede parecer inútil. Sin embargo, es muy útil dado que nos ayuda a tomar conciencia sobre nosotros mismos y sobre nuestro propio entorno. Nos dice “dónde estamos”, “dónde queremos ir” y “qué debemos hacer”. Y te doy los ingredientes:
Haz un análisis del mercado laboral y concretamente de tu sector: A la hora de buscar trabajo, es importante conocer la situación en la que se encuentra el sector en el que has trabajado anteriormente. Así, conocerás qué nivel de empleabilidad tiene y qué requisitos debieras tener para volver a entrar en contacto con el mismo. Es decir, quizás es un sector que está (entrando) en decadencia o está sobresaturado con una alta ocupación y debas buscar otras alternativas como la de renovar conocimientos o reinventarte hacia otros campos.
Haz un ranking de las empresas de las que te gustaría formar parte: te será de gran ayuda, dado que a la hora de trazar una meta en la búsqueda de empleo, no solo valen las ganas de trabajar sino que también cuenta cómo te visiones a ti mismo en el futuro. Querer es poder.
Conócete a ti mismo: En primer lugar, sácale el partido a tus conocimientos y a tu experiencia profesional. Pregúntate a ti mismo qué hacías en tu día a día con cada tarea que te asignaron en cada uno de los puestos que has ocupado. Después, plásmalo en tu CV incluyendo competencias, habilidades y destrezas desarrolladas en el pasado. En segundo lugar, en tiempos de inactividad laboral, ocupa tus tiempos libres tratando de abarcar más conocimientos de dicho sector. Será un aspecto que dirá mucho sobre tu rigor profesional y por supuesto, será valorado positivamente.
Conoce tus recursos y herramientas: Es hora de revisar tus cartas de presentación y tus CV y ver si merecen alguna reestructuración de contenidos; busca un nuevo enfoque y trata de destacar lo que mejor sabes hacer; véndete bien. No olvides personalizarlos y adaptarlos a cada oferta de empleo; los requisitos y competencias pueden ser distintos para cada uno de los puestos que quieras ocupar. Recuerda que uno de los aspectos más importantes es lograr concertar una entrevista personal con el profesional de Recursos Humanos y una vez estés dentro de un proceso de selección, sácale partido a tu perfil; demuestra lo que de verdad sabes hacer.
Googleate: ¿Eres visible en Internet o en alguna Red Social? Aparecer en Internet, nunca es malo, siempre y cuando sea por aspectos profesionales. Si no es así, trata de que esos contenidos desaparezcan, puesto que el Reclutamiento 3.2 se encargará de valorar tu reputación on-line. Es por ello que te aconsejamos estar presente en Redes Sociales, al menos en las Profesionales, como por ejemplo LinkedIn, donde deberás mantener tu perfil actualizado y con todos los contenidos detallados. Recuerda que será tu aliado para construir tu marca personal.
Sé constante: si no obtienes resultados positivos, sigue intentándolo y/o repasa los pasos anteriores que te he marcado. Recuerda que “nunca llueve a gusto de nadie”, que “quien no arriesga no gana” y que “lo importante no es caer sino levantarse”.
2. LA APTITUD
La aptitud es otro de los ingredientes estrella para encontrar empleo. ¿Por qué? Porque debemos de estar motivados para la búsqueda de empleo, y debemos de estar preparados para cualquier desencadenante, bien sea positivo o negativo. Concretamente deberás luchar contra tu frustración de la siguiente manera:
Aísla tus creencias negativas o terminarás por hundirte: Como hemos comentado anteriormente, el ser humano, por naturaleza, tiende a castigarse a sí mismo y no es capaz de ver más allá. Márcate pequeñas metas para alcanzar tus objetivos.
No consideres que estar desempleado es un tema tabú: Tampoco se trata de difundirlo abiertamente. Pero sí que es importante pensar que hay otros muchos que se encuentran en tu misma situación y que por ello, tú no puedes ser menos que ellos. Trátalo con tu círculo de contactos más próximo, pues ellos pueden echarte una mano en la búsqueda de empleo, recomendarte a otras empresas y sobretodo, darte el apoyo que necesitas; la confianza de tu entorno más cercano. De lo contrario, lo que conseguirás es generar pensamientos tóxicos y negativos.
No encuentro salida, no soy nadie: La hay, eres alguien, eres tú mismo, quiérete. Afortunadamente, la búsqueda de empleo no es uno de esos aspectos en los que la vida no te da otra alternativa. Si no logras encontrar la salida por tus propios medios, ponte en manos de profesionales de coaching laboral para que te acompañe en este arduo camino, porque déjame que te recuerde una vez más que si hay salida.
Para ayudarte en esta parte tenemos un video de uno de los mejores conferencistas para aperturar tu mente y hackearla, no tratamos de que cambies cultura, religión o ideologías, lo que queremos es que veas si estás en el plan de víctima o de vencedor.
Nuestro regalo de hoy:
Recuerda que puedes obtener tu plan de acción de búsqueda empleo, enfócate, entiéndete y ve porque te está costando no tener empleo, clickeando aquí:
Si sigues haciendo lo que haces, seguirás obteniendo lo mismo. ¡¡CAMBIA YA!!
Y no dejes de ver el video, para que trabajes tu actitud, te enamorarás y te valorarás más y sobre todo obtendrás ese empleo.
"Si te activas, y en vez de sentarte y tirar la toalla, deprimirte, culpara a la vida, sociedad o a los de reclutamiento por no darte trabajo; verás en poco tiempo un resultado muy favorecedor en el plano personal como en el profesional, y lo más importante CREE EN TI, que no eres el primero ni el único que no encuentra empleo. Y el responsable de tener o no tener empleo es tuya, de nadie más"
ÁNIMO, TÚ PUEDES
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